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Cuanto dura el celo de una gata y como tratarlo
¿Tu gatita está creciendo muy rápido? Es posible que ya no sea una pequeña que explora su nuevo mundo y que su cuerpo comience a prepararse para ser mamá; sin embargo, el que su cuerpo comience a madurar sexualmente, no significa que deba ser madre muy pronto.
Tener una gata en celo puede ser una experiencia complicada para todos los miembros de la familia y también para la propia gatita.
A continuación, te compartimos lo que debes saber sobre el desarrollo sexual de tu mascota y como actuar ante el celo de las gatas.
Pubertad en gatos
Los gatos crecen con rapidez. Después de los 6 meses de edad tu gata empieza a sentir atracción sexual y todo su comportamiento cambia, se vuelve un felino más rebelde; en gatos machos esta etapa puede empezar a los 6 o 7 meses y a los 5 u 8 meses en gatas hembras.
Por otra parte, no es recomendable que tengan a sus primeras crías durante esta etapa temprana, ya que su cuerpo no ha terminado de desarrollarse por completo; es por ello que se debe tener especial atención para evitar que la gatita escape y tenga un apareamiento.
Cambios de comportamiento
Después del primer medio año de vida y durante los periodos de celo, el comportamiento de tu felina cambiará de forma notoria. Es común que se presente un aumento de los maullidos, además, buscará frotar su cabeza o cuello sobre muebles o con las piernas de las personas.
Dependiendo de la gata podría manifestarse más agresiva o afectuosa de lo normal, así como el aumento de movimientos con las patas.
¿Cuánto dura el celo de una gata?
Normalmente las gatas entran en celo en función de las estaciones del año; sin embargo, en el hemisferio norte, el ciclo de las gatas va desde el comienzo del año hasta finales de septiembre, y le sigue un periodo de inactividad sexual de entre tres y cuatro meses.
No obstante, estos tiempos han cambiado últimamente en gatos domésticos, ya que su adaptación a los hogares modernos ha propiciado que el celo de las hembras felinas se genere cada 3 semanas aproximadamente y se prolongue durante todo el año independientemente de las condiciones climáticas.
Si tu gata está en celo, es probable que permanezca en esta fase durante un largo periodo de tiempo que podría generar estrés en casa.
El ciclo reproductivo de las gatas consta de 4 fases:
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Proestro:
Esta fase dura entre 1 y 3 días. Se caracteriza porque la hembra comienza a atraer mediante su olor al macho, pero se muestra hostil si se acerca.
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Estro:
Normalmente dura de 3 a 6 días. Es en esta fase en la que permite al macho que la monte y en la que puede quedar preñada. Si no fue fecundada, podría reiniciarse el ciclo reproductivo.
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Anestro:
Si no cuenta con suficiente luz solar comienza una fase de inactividad sexual que dura entre 3 y 4 meses.
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Interestro:
Este periodo suele durar una semana, se caracteriza por ser un momento de inactividad entre dos celos y a veces suele durar muy poco tiempo.
Sin importar en qué etapa se encuentre tu gatita, bríndale el apoyo, comprensión y cariño que necesita y cuida que ningún gato aparezca en su camino si no deseas que haya un embarazo.
Por otro lado, hay dueños que no desean pasar por esta etapa, por lo que el método de la esterilización o castración, resultará efectiva para evitar desde el celo hasta el embarazo de una gata.
¿Cómo se aparean los gatos?
Si la gata se ha decidido por un gato, generalmente lo alienta a que se acerque a ella. Esto puede variar mucho de un gato a otro. En cualquier caso, la gata tiene sus estrategias: a menudo se esfuman antes de animar al gato a que se acerque.
Para la gata, el apareamiento es cualquier cosa menos placentero, pero al menos termina rápidamente: el gato macho se fija en el cuello de la hembra y patea hasta que encuentra la posición correcta.
Después de algunos empujones apresurados, el acto ya está completo y el gato sale corriendo. Hay pequeñas púas en su pene que provocan la ovulación, pero también son muy dolorosas para la gatita. Sucede que, cuando el dolor pasa después de unos minutos, todo el juego comienza de nuevo.
¿Cómo saber si mi gata está en celo?
Cualquiera que haya experimentado alguna vez a una gata en celo podrá identificar el comportamiento en el futuro. Por otro lado, si es la primera vez que observas el celo, es posible que estés preocupado por tu gata. Por eso, es bueno saber qué signos apuntan a este periodo.
Cada gata es diferente, por lo que los signos de estar en celo difieren de un animal a otro. Sin embargo, esta fase casi siempre se caracteriza por un fuerte maullido y los dueños de mascotas sin experiencia a menudo temen que su gatita tenga un dolor intenso. Sin embargo, este no es el caso con el celo normal.
Un segundo comportamiento notable es que las gatas en celo buscan cada vez más la proximidad a los humanos. A menudo se frotan la cabeza contra las piernas o quieren acurrucarse.
Algunas gatas también se mueven cerca del suelo, como si estuvieran arrastrándose. Si quieres comprobar si la gata está en celo, puedes acariciarla en la base de la cola. Una gata en celo, moverá la cola hacia un lado o estirará el trasero hacia arriba .
Todas estas son señales de que está lista para el apareamiento.
La importancia de la castración
Por todo lo anterior es que es tan importante la castración . Los gatos son animales extremadamente fértiles. Una gata doméstica puede tener hasta tres camadas al año con una media de cuatro a cinco crías
Razones para esterilizar a tu gata
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Previene el sufrimiento animal innecesario causado por la reproducción descontrolada.
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La castración hace que la vida de los gatos machos que viven en libertad sea más segura, ya que pierden el deseo de participar en peligrosas peleas.
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Las gatas se ahorran el gran estrés de estar en celo.
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Tienen un menor riesgo de desarrollar cáncer de mama (tumores mamarios); este riesgo es incluso siete veces mayor en las gatas no castradas que en sus contrapartes castradas.
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